viernes, 15 de noviembre de 2024

Vínculos

Una vez alguien me dijo que lo lograría, que solo depende de cuanto esfuerzo y empeño ponga para alcanzar mis sueños. Su cariño y confianza en mí, en mi forma de relatar las ideas,  en la emoción que se reflejaba en mi mirada al hablar de lo que quería conseguir, y cómo atentamente daba empuje con sus palabras a mis momentos de explayarme. Afirmar, que conseguir todo eso no era  algo imposible para mi. Era una persona que creía en mí, que a pesar de nuestra diferencia de edad, de ella ser una madre, abuela y persona sin relación sanguínea conmigo, me hizo entender que teníamos un lazo, que en su momento fue lo que me llevó  a vivir mi vida de forma diferente.
Poco a poco descubrí a medida que el tiempo fue pasando, que existen estas conexiones con  las personas que  encontramos en nuestro entorno, en lo cotidiano de nuestras vidas y que su existencia tiene una razón de ser. 
Hoy vengo a hablar de los vínculos, son un lazo afectivo emocional que se forma entre dos personas. Es ese hilo invisible que nos conecta, y que influye en cómo nos sentimos, pensamos y nos comportamos. 
En la infancia, es donde se encuentran los primeros, algunos los tienen con sus padres o sus cuidadores, y son fundamentales para el desarrollo emocional y social. Depende de cómo atravesamos esta etapa de la vida nos pueden afectar al crecer en el autoestima o la autopercepción. Si nos brindan cariño, contención , apoyo y cuidados básicos, nos ayuda a tener una autoestima más bien alta. Es también una pata fundamental en nuestra capacidad de establecer relaciones; los vínculos seguros, nos ayudan a desarrollar habilidades sociales y a construir futuros lazos con otras personas en la medida que sea necesario.  La visión del mundo, puede ser totalmente diferente dependiendo de estas acciones en nuestra llegada a él, simplemente nos hacen interpretar la percepción de los demás y de nosotros mismos.

Ahora en la adultez tratamos con un mundo dinámico, caótico y sobre todo repleto de vínculos, pero en realidad ¿somos conscientes de ellos?  Nuestros padres, amigos y personas que estaban presentes en la infancia, ya no están del todo presentes, a medida que salimos al mundo, nos tornamos independientes, establecemos nuevas relaciones, laborales, amistades, educación, incluso amorosa. Mantener un vínculo depende de muchos factores, además del esfuerzo que hacen las dos personas para el trabajo y la reafirmación del mismo, por ejemplo: mis hermanas y yo tenemos una relación afectiva de construcción continua, a pesar de la distancia, la diferencia de edad y gracias a las facilidades que nos otorga la comunicación. Pero sin duda es un régimen aceptado, libre y sobre todo deseado. 
A medida que fui transitando la vida, me di cuenta que mi bienestar emocional, depende de mí misma. Pero es mucho mas fácil cuando estás acompañada de personas que están dispuestas a escucharte y a compartir contigo. Las amistades, son ejemplos perfectos de esto, pues son vínculos  que uno forja con un ser extraño que coincide y hay un interés mutuo, con el compartir, la aceptación de unos a otros, las pautas de convivencia hacen que estos poco a poco se vayan estableciendo. 
El amor, es uno de los trascendentales, aquí voy a hacer referencia al amor de pareja, ya que creo que el amor puede ser diversificado y aplicarse en diferentes contextos. Pero, el vínculo que tienen dos personas quienes deciden compartir una vida, emprender la relación de compromiso y de lucha, creo que es tan fuerte como el hecho que libremente optamos por elegir a ese otro. 

Así como nos encontramos con todo tipo de vínculos que nos permiten crecer, desarrollarnos, sentirnos parte y  hacernos mejores personas. También los hay aquellos que son tóxicos, que tienen relación de dependencia, donde hay una dominación y una sumisión impuesta. Los hay de, establecimientos prohibitivos, y de castración. Sin control, e incluso sin conocimiento pleno. 

Las personas con las que nos relacionamos,y les otorgamos cierto poder y herramientas para conocernos pueden ser aquellos quienes nos ayudan a crecer y ser plenos, pero también pueden no ser lo que nosotros pensamos.  Ahora bien, por qué vengo a decir todo esto. Simplemente, con un objetivo de advertir que hay este proceso dentro de nuestra vida cotidiana, conocemos personas nuevas, tratamos con ellas, estamos siempre en una especie de juego, somos los dueños de nuestro destino, es importante saber quién es cada uno y cuanto es lo que estoy dispuesto a ceder por el otro. Algunas personas, puede que no valgan la pena el esfuerzo, pero a la vez puedes encontrar a personas increíbles, dispuestas a ser una pieza fundamental en tu futuro, capaz de compartir espacio en su historia y que te muestren un antes y un después del mundo luego de conocerlas.

“Somos seres sociales por naturaleza, y la conexión con otros es esencial para nuestra felicidad.”- Mark Manson


¿Estás dispuesto a nuevos vínculos?


Libra. 

domingo, 10 de noviembre de 2024

Vivir sin violencia

Hoy vengo a descargar un poco mi opinión sobre un tema muy relacionado con la actualidad. Lamentablemente, vengo a reflexionar acerca de la violencia, siendo la definición de la OMS como "el uso deliberado de la fuerza física o el poder, ya sea en grado de amenaza o efectivo, contra uno mismo, otra persona o un grupo o comunidad, que cause o tenga muchas probabilidades de causar lesiones, muerte, daños psicológicos, trastornos del desarrollo o privaciones".
Suena muy técnico, lo sé, pero necesito que tengamos muy claro el concepto, porque quiero hablar en particular de la violencia psicológica, que puede surgir en lo cotidiano de nuestras vidas. Creo que es un tema que tal vez lo vemos como lejano, pero es más cercano de lo que se piensa.
Con esto quiero dejar en claro dos cosas, la primera, hablo desde una perspectiva de conocimiento de causa, estuve expuesta más de una vez a situaciones de violencia e incluso fui una víctima de la misma. Y segundo, lo que exprese en éste texto, no es necesariamente aplicable a todas las situaciones. Como mensaje principal, si alguna de las cosas que leas aquí llaman tú atención, o te suceden, puedes solicitar ayuda. No estás solo/a.

Es normal, es natural, lo acepto, todos tienen sus cositas, lo hago enojar, es mi culpa, yo no debería decirle nada a nadie, me van a mirar mal, me da vergüenza... Así y de muchas formas más, trabaja la mente. Quien inflige la violencia, tiende a hacernos creer, que lo que sucede es parte de la normalidad y cotidianeidad de todos; que sus actitudes o palabras son a causa de nuestro comportamiento y/o forma de ser, y nos aíslan del círculo social de manera directa (con amenazas y mentiras) o de formas indirectas (haciendo que la percepción personal se distorsione). 
Pero... ¿cómo llegamos a ser víctimas en realidad? que dificil responder, nadie en su sano juicio quiere ser victima, nadie va a un lugar para sufrir a menos que sea consciente de esto y le de placer (masoquismo). El o la violenta, tienen la capacidad de no solo ejercer poder sobre la víctima, que la misma acceda de forma inconsciente, pero generalmente tienen personalidades capaces de mentir a detalle, de manipular los hechos, de conseguir credibilidad con pruebas, de trabajar tus gustos y darte cosas buenas, cariño, promesas, respeto. Hay una posibilidad muy amplia de que lo que nos ofrecen a cambio de lo normal, sea algo que es muy valorado o en caso contrario no queremos perder algo que pueden amenazar. 

Como les cuento, la violencia se puede encontrar en tu propia casa, tu esposo, tu pareja, tu mujer, tu padre, tu madre, el vínculo que tienen con tal o cual persona. Siempre hay dos condiciones que se dan, una persona que somete y un sometido. Es probable, que ciertas cosas te hagan ruido, pero hay casos en los que ni siquiera eres capaz de darte cuenta. Son muchas las formas en las que pueden hacerte daño. La violencia doméstica o de pareja puede ser explícita, gritos, maltratos, desprestigio, burlas, insultos, insinuaciones, prohibiciones. O in explícitas, económicas, psicológicas.  

Ahora,me voy a permitir hablar de un caso en particular que me ha llevado a la reflexión de este tema, hace unos días una amiga me comentó que encontró una remera que se había comprado hace un tiempo, toda rota y tirada en uno de los cestos de basura de su casa. Su marido, había manifestado anteriormente que dicha prenda no era para ella, que no debía vestirse de esa forma ya que provocaba a otros hombres. Ella, dejó pasar el comentario ya que no tenia intención de hacer lo que su esposo insinuaba. Tomo esa prenda y la guardo entre sus pertenencias. Poco a poco el hombre le solicitó que tirara dicha prenda y otras más, ya que manifestaba la propiedad del cuerpo de su esposa. En el proceso de dos meses, los comentarios se fueron tornando despectivos y ya no solo por la forma de vestir, sino que por los gestos y la personalidad; motivo por el cual el masculino menciono que partir de un momento determinado él iba a comprar la vestimenta de su mujer ya que ella era mala madre y esposa por su forma de vestir y de ser. Poco a poco, el conflicto del hombre se extendió a lo referido a las tareas del hogar y a él tiempo libre de ella. En este relato, claramente había señales de violencia, pero aún así para ella solo el marido estaba intentando “cuidarla”. Estar en esta situación, es muy dificil, sobretodo porque hay un sentimiento y un vínculo de por medio. Las personas cambian, y si puede que nunca hayan demostrado rasgos de violencia con anterioridad. Y de golpe, un día menos esperado hay una señal. Aunque solo es un ejemplo de violencia que no llega al extremo, o al menos solo tomo parte del relato por sensación de protección de la víctima. Lo que quiero alertar es, NO NECESARIAMENTE TE TIENE QUE GOLPEAR PARA SER VIOLENTO. Mis disculpas con el genero masculino y me refiero más a un El que a una ella, lamentablemente las estadísticas y la fomentacion de machismo hizo que sean la mayoria, pero vuelvo a aclarar, las mujeres también ejercen violencia, incluso de formas más complejas y hasta de cierta forma podría decir que los hombres sometidos sufren sin un marcó que los ayude,tan visible como la mujer. Es esto algo a tener en cuenta para las normativas sociales y los derechos que vamos ganando. 

La violencia de género, el sometimiento de los hombres tras una mujer violenta, el maltrato de la comunidad LGBT+, los femicidios. Son parte de la actualidad, no debe ser tabú. Es pertinente que se haga hincapié en las siguientes generaciones la necesidad de poder establecer límites sanos, conocer los riesgos, los derechos y libertades de las personas por el solo hecho de ser persona y que debemos tener valores marcados, la burla, el insulto o el menosprecio, tienen que dejar de ser naturalizado. 

Tengo la esperanza que en algún momento podemos aspirar a vivir con índices de violencia más bajos. Pero para eso les hago el llamado para colaborar. El cambio empieza por educarse cada uno y educar a los demás. LUCHEMOS POR UN MUNDO SIN VIOLENCIA. 

Libra